Los juguetes sexuales más extraños de la historia

La historia del placer está llena de inventos insólitos que demuestran la creatividad humana en la búsqueda del goce. Muchos de estos objetos nos resultan extraños hoy en día, pero durante siglos se consideraron normales e incluso sagrados. En este recorrido educativo e informativo veremos ejemplos de los juguetes sexuales más poco comunes: consoladores prehistóricos, prototipos medievales, curiosidades victorianas y extravagancias modernas.

Juguetes sexuales en la Prehistoria y la Antigüedad

Los arqueólogos han encontrado evidencias de que los primeros consoladores se fabricaban hace decenas de miles de años. Por ejemplo, en Europa se han hallado objetos de piedra tallada de gran tamaño que se usaban como herramientas eróticas. Estos se elaboraban con materiales resistentes como piedra, hueso, marfil o madera, y se pulían para permitir un uso más cómodo.

En el Antiguo Egipto existen representaciones artísticas que muestran el uso de consoladores, mientras que en la Antigua Grecia se popularizaron los consoladores de cuero rellenos de lana, lubricados con aceite de oliva. Los griegos fueron incluso los primeros en llamar “juguetes” a estos instrumentos eróticos. Textos de la época confirman que eran de uso común entre mujeres cuando sus esposos estaban ausentes.

Una anécdota muy difundida habla de Cleopatra, quien supuestamente utilizaba una calabaza hueca llena de abejas vivas para crear vibraciones. Aunque no se sabe si la historia es cierta, refleja la creatividad de las civilizaciones antiguas a la hora de explorar el placer.

Innovaciones victorianas y juguetes médicos

En el siglo XIX, en la época victoriana, muchas mujeres eran diagnosticadas con “histeria femenina”. El tratamiento médico consistía en masajes pélvicos que llevaban al orgasmo, conocido entonces como “paroxismo histérico”. Para evitar el cansancio de los médicos, se diseñaron vibradores mecánicos y más tarde eléctricos. El primero de ellos, inventado en 1870, fue un vibrador electromecánico que rápidamente se comercializó como un masajeador doméstico.

Los primeros modelos eran grandes, ruidosos y en algunos casos funcionaban con vapor o agua. Aun así, fueron los precursores de los vibradores modernos, más pequeños, silenciosos y discretos.

Curiosidades sexuales de otros tiempos

A lo largo de la historia se han creado juguetes sexuales que destacan por su rareza o por su carácter innovador para la época:

• Tapones anales de jade en China: Usados con fines rituales y funerarios, también llegaron a considerarse objetos de poder relacionados con la energía vital.
• Anillos de erección tradicionales: Elaborados con materiales curiosos como piel de animales, se utilizaban para mantener la erección y aumentar la estimulación.
• Consolador eyaculador en Francia: Fabricado en el siglo XVIII, era capaz de simular la eyaculación, mostrando un sorprendente nivel de detalle para la época.
• Sofá erótico “Siege d’amour”: Encargado por el futuro rey Eduardo VII de Inglaterra, estaba diseñado para encuentros sexuales múltiples y de gran comodidad.
• Harigata japonés: Consoladores representados en el arte erótico japonés, que a veces incluían mecanismos para dar sensación de mayor grosor o dureza.

Juguetes sexuales en la era moderna

Durante el siglo XX la producción de juguetes sexuales se multiplicó. Uno de los más conocidos es el famoso vibrador “Magic Wand”, que en un inicio fue comercializado como masajeador de espalda, pero rápidamente ganó popularidad como juguete íntimo. También surgieron dildos de plástico moldeado y, con la revolución sexual, comenzaron a verse como artículos de bienestar y no solo como objetos tabú.

En la actualidad, la industria erótica incluye desde vibradores de silicona controlados por aplicaciones móviles hasta juguetes de realidad virtual y robots sexuales. La innovación tecnológica ha transformado el panorama y hoy existe una gran variedad para todos los gustos.

Reflexiones finales

Aunque algunos de estos ejemplos nos resulten extraños o divertidos, muestran que la búsqueda del placer ha acompañado a la humanidad desde la antigüedad. Cada cultura y cada época ha encontrado sus propias formas de explorar la sexualidad, ya sea con fines rituales, médicos o simplemente lúdicos.

Conocer estas curiosidades sexuales no solo despierta la risa o la sorpresa, también nos ayuda a comprender que la sexualidad es un aspecto natural de la vida humana. Aprender sobre ella de manera informada y responsable nos permite vivirla con mayor libertad, respeto y consciencia.

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